Ataque israelí en Beirut deja sin vida a alto mando de la Guardia Revolucionaria iraní y líder de Hizbolá

La agencia Mehr confirmó que “el general de brigada Abbas Nilfrushan falleció en el ataque de Israel contra Beirut, junto con el líder de Hizbolá Hasán Nasrala”. Nilfrushan ocupaba un puesto clave como subcomandante de operaciones dentro de la Guardia Revolucionaria, y algunos informes lo vinculan con la Fuerza Quds, una división encargada de las operaciones exteriores del ejército iraní en Líbano.

Estados Unidos había sancionado a Nilfrushan en octubre de 2022 debido a su papel en la represión de protestas pacíficas, particularmente en las regiones mayoritariamente suníes de Sistán y Baluchistán. Este hecho resalta su papel clave en las tensiones internas y externas que enfrenta el régimen iraní.

Este incidente se suma a una serie de ataques recientes. En abril, un ataque atribuido a Israel en Damasco cobró la vida de siete miembros de la Guardia Revolucionaria, incluidos tres generales. Como respuesta, Irán lanzó una serie de misiles y drones contra Israel, marcando la primera vez que Teherán atacó directamente suelo israelí, aunque los daños fueron limitados.

El ataque del viernes, descrito como uno de los más intensos contra los suburbios de Beirut, tuvo como objetivo un edificio residencial donde se encontraba la sede de Hizbolá, resultando en la muerte de Nasrala, uno de los más cercanos aliados de Irán en el mundo árabe. Su muerte representa un golpe significativo para el grupo chií libanés y sus aliados regionales.

A pesar de este revés, Irán ha prometido que el legado de Nasrala perdurará y que su movimiento no se verá interrumpido por los bombardeos israelíes. El ataque subraya la tensión creciente entre Israel y el llamado ‘Eje de la resistencia’, liderado por Irán y compuesto por grupos como Hizbolá, Hamás y los hutíes de Yemen, quienes mantienen una postura abiertamente hostil hacia Israel.