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El Papa Francisco renueva su llamado a la paz tras mil días de conflicto en Ucrania

En el marco de los mil días transcurridos desde el inicio de la guerra en Ucrania, el papa Francisco ha reiterado su mensaje de esperanza y reconciliación, destacando la necesidad urgente de que se prioricen soluciones dialogadas y pacíficas al conflicto. En una carta dirigida al arzobispo Visvaldas Kulbokas, representante del Vaticano en Ucrania, el pontífice expresó su profundo pesar por los efectos devastadores de la guerra y la continua violencia que afecta a millones de personas.

Francisco subrayó que “será Dios quien pronuncie la última palabra sobre esta inmensa tragedia” y pidió a los líderes implicados que trabajen activamente en el restablecimiento de la justicia y la concordia. En un gesto simbólico, el papa utilizó la palabra Paz en mayúsculas, enfatizando su importancia en un mundo donde este valor parece haber sido olvidado, especialmente en el contexto de la “querida Ucrania”.

Llamado constante a la comunidad internacional

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Desde el inicio del conflicto, el papa Francisco ha mantenido una postura firme en favor de la paz, reflejada en sus audiencias, misas y mensajes oficiales. Durante esta jornada, utilizó la red social X para reiterar su rechazo a la guerra, calificándola como “una derrota” y exhortando a la comunidad internacional a comprometerse con una paz justa y duradera.

Por otro lado, el secretario de Estado vaticano, Pietro Parolin, añadió un mensaje contundente, instando a los líderes mundiales a no rendirse ante la guerra y a asumir su responsabilidad para detener la “carnicería en curso”. Estas declaraciones reflejan el esfuerzo continuo del Vaticano por mediar en la búsqueda de soluciones humanitarias, incluyendo acuerdos para el intercambio de prisioneros y el regreso de los niños ucranianos deportados.

Una plegaria que trasciende fronteras

Francisco reconoció en su misiva que las palabras humanas no son suficientes para mitigar el sufrimiento de quienes han perdido a sus seres queridos, enfrentan los bombardeos diarios o padecen los efectos del crudo invierno. Sin embargo, reafirmó su fe en la capacidad del mundo para unirse en oración y solidaridad con el pueblo ucraniano, destacando que cada lágrima será recogida por Dios.

El mensaje del pontífice no solo busca consolar a los afectados, sino también movilizar a los responsables de tomar decisiones hacia un cambio que permita el fin de esta tragedia histórica.

Imagen: EFE
Imagen utilizada con fines informativos y periodísticos.

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