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Trump se prepara para su segundo mandato con un control ampliado del poder

Donald Trump asumirá nuevamente la presidencia con un control casi total sobre las instituciones gubernamentales de Estados Unidos, ahora que los republicanos han logrado sumar la Cámara de Representantes a sus victorias en la Casa Blanca y el Senado. Con esta posición, Trump impulsará con fuerza su agenda nacionalista bajo el lema “Estados Unidos primero”.

Trump obtuvo una ventaja de más de tres millones de votos en el recuento preliminar, consolidando un contundente triunfo sobre la demócrata Kamala Harris en el voto popular. Con este resultado, está a punto de convertirse en el primer presidente republicano en dos décadas en conseguir este logro, una vez que se certifiquen oficialmente los resultados.

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Con 312 votos electorales frente a los 226 de Harris, Trump aseguró una sólida mayoría en el Colegio Electoral. Además, arrasó en los siete estados decisivos, triunfando en cada uno de los territorios clave para esta elección. Este resultado le permite reivindicar una mayor legitimidad en comparación con 2016, cuando perdió el voto popular ante Hillary Clinton. En su discurso de la noche electoral, Trump aseguró que “Estados Unidos nos ha otorgado un mandato sólido y sin precedentes”.

Los comicios intermedios, programados para dentro de dos años, serán una oportunidad para que los demócratas evalúen la fuerza del nuevo mandato de Trump.

El miércoles, los republicanos consolidaron su mayoría en la Cámara de Representantes, culminando con éxito la elección de la semana pasada. Tras varios días de escrutinio, CNN y NBC proyectaron que el partido de Trump había obtenido los 218 escaños necesarios para mantener su dominio en la Cámara baja de 435 asientos. Esto, sumado al control del Senado, allana el camino para que Trump pueda designar a miembros clave de su administración y avanzar en su agenda, que incluye recortes de impuestos, endurecimiento de políticas migratorias y desregulación.

El control sobre el Partido Republicano, ahora purgado de figuras críticas a la agenda de “Make America Great Again”, otorga a Trump un margen de maniobra considerable. No obstante, para avanzar muchas leyes en el Senado, se requiere una mayoría de 60 votos, una cifra que los republicanos no poseen.

Durante su primer mandato, Trump era un recién llegado a la política y delegó parte de su gestión en figuras experimentadas del Partido Republicano y líderes militares. Sin embargo, en este segundo mandato, ha dejado claro que planea rodearse de leales. Sus recientes nominaciones lo confirman: Marco Rubio como secretario de Estado, Pete Hegseth al frente de Defensa, Matt Gaetz como fiscal general y Elon Musk para dirigir un nuevo organismo enfocado en la eficiencia gubernamental.

Reforma de la Corte Suprema
Durante su primer mandato, Trump nominó a tres jueces conservadores, consolidando una mayoría de 6-3 en la Corte Suprema. Con esta ventaja, el tribunal ha emitido fallos favorables a los republicanos, incluyendo la anulación del derecho nacional al aborto en 2022. Además, los jueces Clarence Thomas y Samuel Alito, de 76 y 74 años respectivamente, podrían retirarse, permitiendo a Trump seleccionar reemplazos jóvenes que fortalecerían la orientación conservadora de la corte por décadas.

Ampliación de la inmunidad presidencial
La Corte Suprema decidió recientemente que los presidentes tienen inmunidad absoluta por actos “oficiales” durante su mandato. Esta resolución, que surgió del caso federal contra Trump relacionado con su derrota en 2020 ante Joe Biden, podría resultar en la desestimación de varios procesos en su contra ahora que ha sido reelegido.

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