El agua embotellada podría ser una fuente oculta de microplásticos y riesgos para la salud, según estudio chino

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• marzo 19, 2025
• Salud
• agua embotellada, benzopireno, contaminación ambiental, Microplásticos
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Un reciente estudio realizado por investigadores chinos ha revelado que el agua embotellada es una de las principales fuentes de microplásticos, partículas que actúan como transportadores de sustancias tóxicas como el benzopireno (BaP). Este contaminante, presente en el medioambiente, puede causar daños significativos en la pared intestinal y los riñones, además de provocar inflamación sistémica en el organismo. Los hallazgos, publicados en Communications Biology, han encendido las alarmas sobre los efectos de estos compuestos en la salud humana.

El benzopireno, un contaminante ambiental común, se adhiere a los microplásticos, lo que facilita su ingreso a los organismos vivos. En experimentos con ratones, se observó que la combinación de poliestireno (PS) y BaP altera el metabolismo lipídico renal, desencadenando un proceso conocido como ferroptosis, que conduce a la muerte celular. Aunque los mecanismos exactos no están del todo claros, se ha demostrado que el BaP se absorbe principalmente a través del intestino después de la ingestión oral, lo que aumenta los riesgos para la salud.

Microplásticos: un problema global

Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), los microplásticos son partículas diminutas compuestas de polímeros y aditivos potencialmente tóxicos. Su pequeño tamaño dificulta su eliminación del medioambiente, lo que ha llevado a su detección en diversos alimentos y, alarmantemente, en partes del cuerpo humano, como el tracto digestivo, los pulmones, la sangre, la orina, las heces e incluso la placenta. Se estima que, para 2050, se habrán producido alrededor de 33.000 millones de toneladas de residuos plásticos, lo que agrava aún más el problema.

Alternativas y recomendaciones

Un estudio publicado en septiembre de 2024 por el Centro Médico Weill Cornell de EE.UU. sugiere que el agua del grifo es una opción más segura y ecológica en comparación con el agua embotellada. Los autores del estudio destacan que, aunque se han realizado esfuerzos para promover el uso de agua potable en espacios públicos y reducir el consumo de plásticos desechables, estas medidas no son suficientes.

«La dependencia del agua embotellada conlleva importantes costos sanitarios, financieros y ambientales, lo que requiere una revaluación urgente de su uso generalizado», señalan los investigadores. Además, hacen un llamado a los gobiernos, especialmente en países de ingresos bajos y medios, para que inviertan en infraestructura de agua potable y aborden este problema de manera prioritaria.

Conclusión

Los hallazgos de estos estudios subrayan la necesidad de tomar medidas inmediatas para reducir la exposición a microplásticos y sus efectos nocivos en la salud. Mientras tanto, optar por alternativas como el agua del grifo y reducir el consumo de plásticos desechables podrían ser pasos clave para mitigar este problema global.

Imagen: Gettyimages.ru
Imagen utilizada con fines informativos y periodísticos.