Únete a Nuestro Canal de WhatsApp
🔥 ¡Ofertas especiales a solo un clic de distancia! ¡Consigue regalos gratis en https://temu.to/k/ucotsgsm450!
La maestra Ana Cristina Roa Ramírez, de la UASD, aboga por una interacción afectiva en la docencia universitaria, destacando la importancia del respeto, la motivación y la neurodidáctica para un aprendizaje efectivo.

Educadora considera comportamiento afectivo de docentes hacia estudiantes en el aula es fundamental para el aprendizaje

Comparte esta noticia:

La maestra Ana Cristina Roa Ramírez, de la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), abogó por una interacción afectiva y cercana de los docentes hacia sus estudiantes, en ruptura con conductas como el uso del sarcasmo, la ironía, las burlas, las amenazas y los famosos “ganchos”, que no tienen sustento en las teorías pedagógicas actuales y que, como han planteado estudiosos, son heredadas en la cultura dominicana, entre muchos factores, por el régimen dictatorial trujillista.

Sostuvo que lamentablemente este tipo de actitudes están presentes en la práctica pedagógica de algunos maestros universitarios, por lo que se requiere abrazar “una interacción docente que respete la dignidad del estudiantado, su autonomía, como protagonista de su proceso de aprendizaje”, que contemple la demostración de las expectativas y propicie la motivación al estudio, debido a que la interacción afectiva provee un soporte para generar conocimientos o aprender a pensar, y promueve la valoración personal que ayuda al empoderamiento para la transformación social. Esto, agregó, “en oposición a una práctica docente en que el maestro busque ser el centro de atención o demostrar estatus, por medio de discursos o conferencias”.

“Desde que se entra en el aula se está enseñando, se está enviando un mensaje”, manifestó la experta en didáctica. Afirmó que el estudiante que decide ingresar a una carrera universitaria, llega por un sueño, por “una meta personal que a la vez implica progreso para su nación y nuestra actitud como docentes influye significativamente en el proceso de aprendizaje”.

Explicó que el enojo, la ira o amenazas y hasta los famosos “ganchos” activan neurotransmisores relacionados con el estrés, y precisó que tales ideas han sido validadas por  quienes estudian sobre la didáctica actual y, en particular, desde la neurodidáctica.

“Los estudiosos de la didáctica actual valoran la cercanía, la armonía emocional y el disfrute de la clase, y según la  neurodidáctica los profesores son modificadores de la actividad cerebral, confirmando que las emociones positivas activan neurotransmisores que facilitan la conexión de las neuronas y por ende la neuroplasticidad, lo cual permite el logro de los nuevos conocimientos.

Roa, quien posee estudios de postgrado en Enseñanza Superior, recordó que grandes pedagogos como Paulo Freire y Eugenio María de Hostos han evidenciado como requisito de una práctica docente realmente científica, el que  la interacción esté caracterizada por la afectividad, sin negociar el rigor intelectual de la clase.

La docente de la Escuela de Formación Docente para la Educación Infantil y Básica de la Facultad de Ciencias de la Educación (FCE) de la academia estatal planteó que “desde el aprender a convivir, es necesario empezar a valorar la dignidad del estudiantado, no verlo como un número, sino como una persona que es ente de cambio en su sociedad y desde el aprender a hacer, adecuar la metodología de enseñanza al contexto educativo”, así como fomentar en clases la autoevaluación estudiantil. Abogó, igualmente, por la apertura de los docentes a nuevos conocimientos y a manejar su personalidad acorde a la ética profesional. “Desde el aprender a conocer, necesitamos mostrar apertura al conocimiento cambiante, ya que la información en estos tiempos es accesible para todos”  y “desde el aprender a ser, necesitamos el entrenamiento de nuestra personalidad para adaptarlo al rol que desempeñamos y a la ética de la enseñanza”.

La maestra Ana Cristina Roa Ramírez externó sus consideraciones al pronunciar la conferencia “Tu mirada y tu voz. La interacción afectiva en la docencia universitaria”, realizada a partir del artículo del mismo nombre publicado en el cuarto número de la revista Facetas Educativas.

La conferencia de Roa tuvo lugar en el acto de reconocimiento por la indexación de este órgano de difusión académico-científica de la Facultad de Ciencias de la Educación de la UASD al servicio de la reflexión crítica en materia educativa, y de puesta en circulación de su quinto número.

En la ceremonia fueron reconocidos decenas de académicos y académicas de la UASD y de otras universidades dominicanas y de otros países, por sus aportes a la revista como autores o autoras de artículos y ensayos y como pares evaluadores; además, autoridades, funcionarios y personal técnico y administrativo de esta casa de altos estudios y de otras instituciones nacionales que contribuyeron al proceso de desarrollo, virtualización e institucionalización de la publicación, entre quienes se destacaron con menciones especiales la exdecana y la actual decana de la FCE Ana Dolores Contreras Núñez, y Juana Encarnación, respectivamente; el director fundador de la revista, Luis Ulloa Morel; el actual director de la revista y del Instituto de Investigación e Innovación Educativa, Basilio Florentino Morillo;  la editora, Isaura Cotes Javier; los maestros Manuel Herasme y Pericles Romero,  y el director de Investigación de la FCE, Wilfredo Rosario.

Además, el vicerrector de Investigación y Postgrado, Radhamés Silverio; el director de Investigaciones Científicas y Tecnológicas, César Díaz; el director de Tecnología de la Información, Manuel Romero; el coordinador de Sistemas y Páginas Web de la UASD, Marlon Santana; las maestras Angelina Sosa y Carolyne Durán, de la Vicerrectoría de Investigación y Postgrado; las servidoras universitarias Mariela Bello y Kendia Tineo, y los servidores de la Facultad de Ciencias de la Educación José Aquino, Alejandro Gómez, Diego Sosa, Joaquín del Villar y Nayroby Belliard.

De igual manera, Greivis Asencio, de la Biblioteca Nacional Pedro Henríquez Ureña; Dilcia Armesto, del Instituto Dominicano de Evaluación e Investigación de la Calidad Educativa (IDEICE), y Raynelda Rodríguez, educadora.

Con informaciones de ElUniversitarioUASD

Leave A Comment

CLOSE ADS
CLOSE ADS